Delicias de la Sabiduría sobre el Amor Conyugal #2

Por Emanuel Swedenborg

Estudiar este pasaje

  
/ 535  
  

2. Un día vi a un ángel que volaba bajo el cielo oriental, sosteniendo con su mano una trompeta en su boca, la cual hizo resonar hacia el norte, hacia el occidente, y hacia el sur. Estaba vestido con una clámide, la cual por el vuelo ondeaba hacia atrás, y se ceñía con una faja de rubíes y zafiros, la cual parecía flamear y refulgir; volaba inclinado hacia delante, y descendió lentamente a la tierra donde yo estaba. Cuando tocó tierra, caminó, derecho sobre sus pies, de un lado a otro, y entonces, al verme, vino hacia mí.

Yo estaba en el espíritu, y en este estado permanecía sobre una colina en la zona meridional. Y cuando estuvo cerca, le hablé y le pregunté: “¿Qué está pasando ahora? Escuché el sonido de tu trompeta, y vi tu descenso a través del aire.”

El ángel respondió: “'Me han enviado para convocar a los más celebrados por su erudición, a los más perspicaces en ingenio, y a los más eminentes en reputación de sabiduría, que han venido desde los reinos del mundo cristiano y se hallan sobre esta tierra, para que se congreguen en esta colina, donde tú estas, y desde el corazón expongan sus mentes, sobre lo que en el mundo ellos pensaron, comprendieron, y apreciaron, sobre la alegría celeste y sobre la felicidad eterna.

[2] “La causa de mi misión fue ésta: que algunos advenidos del mundo, admitidos en nuestra sociedad celeste, la cual está en el oriente, nos han referido, que ni uno solo en el mundo cristiano entero sabe qué cosa es la alegría celeste y la felicidad eterna, y así, qué cosa es el cielo. Mis hermanos y coasociados se sorprendieron grandemente ante esto, y me dijeron: “Desciende, proclama y convoca a los más sabios en el mundo de los espíritus, en el cual todos los mortales son reunidos primero después de su salida del mundo natural, con el fin, de que por las bocas de muchos, nosotros podamos certificar, si acaso es verdad, que entre los cristianos exista tal obscuridad o tenebrosa ignorancia sobre la vida futura.” Y dijo: “Espera un poco, y verás cohortes de sabios afluyendo hasta acá. El Señor preparará para ellos un edificio de convenciones."

[3] Esperé, y he aquí, después de media hora vi a dos compañías del norte, dos del occidente, y dos del sur. Y cuando vinieron, fueron introducidas por el ángel de la trompeta en una sala que había sido preparada, y allí ocuparon los lugares asignados a ellos según las zonas. Había seis compañías o cohortes; la séptima era del oriente, la cual no era vista por los demás a causa de la luz.

Después de que ellos fueron reunidos, el ángel reveló la causa de la convocación, y rogó, que las cohortes expusieran en orden su sabiduría, sobre la alegría celeste y sobre la felicidad eterna. Y entonces cada cohorte se aglomeró en un círculo, dispuestas cara a cara, para que evocaran este asunto de entre las ideas captadas en el mundo anterior, y para que ahora lo examinaran, y una vez dilucidado, tras mutua consulta lo expusieran.

  
/ 535  
  

Muchas gracias a la "Heavenly Doctrine Publishing Foundation", por el permiso para utilizar esta traducción.